Julio y Timoteo tienen una agencia de detectives especializada en infidelidades matrimoniales con el rimbombante nombre de International Investigation Spanish Section. Pero tras una apariencia de compañía internacional seria y profesional se esconde la cruda realidad: se trata de un negocio ruinoso que sólo sigue adelante por la fe inquebrantable de Julio, un hombre de labia infinita que con su "creatividad" suple el subdesarrollo técnico. Timoteo, por su parte, es en realidad bombero y dedica su tiempo libre a esta aventura detectivesca. Lo único que quiere es ahorrar para casarse con su novia de toda la vida, Rosita. El nuevo caso que tienen entre manos es, según el optimismo de Julio, el que va a dar un empujón definitivo a su agencia. Incluso han comprado una cámara fotográfica nueva con el dinero de Rosita.
