
Patricia pone en marcha su descabellado plan de fingir un falso embarazo. Para ello evita que Julia aborte y le hace una oferta que no puede rechazar: dinero. Como David quiere formar parte de todo el proceso del embarazo, Patricia se ve obligada a chantajear a su ginecólogo para que le encubra delante de su marido. Laura, atractiva abogada y ex novia de César, llega a la hacienda Oramas y pronto establece una relación tensa con Amanda. Aunque César le explica que su acercamiento solo es para golpear al patriarca donde más le duele, Laura sabe que su atracción por la hija de su enemigo es real y le comen los celos. Amanda está a punto de sucumbir a la tentación de César, pero todavía no acaban juntos, la pared de su habitación les separa finalmente.