Han pasado casi treinta años desde que el inspector Jacques Clouseau llevara el caso de Maria Gambrelli, una joven acusada de asesinato, y que gracias a sus investigaciones se descubrió que era inocente. Sin embargo, de aquel caso surgió una relación que traspasó la barrera de lo puramente profesional, de la que nació un hijo, Jaques. Madre e hijo viven ahora en una pequeña ciudad costera de Francia donde pasa sus vacaciones la princesa Yasmin de Lugash junto a su padre. Cuando ésta es misteriosamente secuestrada, para evitar un conflicto diplomático que enturbie las buenas relaciones entre Francia y el reino de Lugash, el comisario Dreyfus es asignado a la investigación junto con la ayuda de un agente local que le sirva de apoyo. Esta responsabilidad recae en Jacques Gambrelli, el hijo desconocido que el inpector Clouseau tuvo.