"Simple, personal y hermosa, como toda buena película debería ser". Así define su productor, el gran Ridley Scott ("Marte (The Martian)", saga "Gladiator"), este 'thriller' dramático que es, a la vez, una historia de crímenes y criminales, una historia de madurez, una historia de redención y una historia de amor. Protagonizada por unos excelentes jóvenes actores debutantes, la película sigue a 55, un adolescente que se gana la vida como carterista en Bombay. Él, como el resto de jóvenes ladrones que trabaja para el despiadado Sagar Bhai, toma su nombre (que lleva tatuado en el brazo) del número que lo identifica dentro de la organización. No es nadie, solo un número... hasta que enfrentarse a la hija de una de sus víctimas le hace replantearse su forma de vida. El encargado de dar vida al implacable Sagar Bhai es la estrella de Bollywood Emraan Hashmi, quien no dudó en participar en "55", aceptando un papel negativo que implicaba afear su glamurosa imagen de actor de Bollywood.