
En una era en la que vivimos más públicamente que nunca en Internet, compartimos cada aspecto de nuestras vidas con cualquiera. Pero, ¿qué hacer cuando alguien roba tu imagen, nombre e incluso las fotos de tu perro, y empieza a usar esa información de forma fraudulenta? Esto le ocurrió a James Blake, un joven de Belfast que estaba construyendo un negocio multimillonario de marketing digital, disfrutando de ropa cara, coches rápidos, fiestas exclusivas y miles de seguidores. De repente, su identidad fue robada y empezó a recibir acusaciones de estafa por decenas de miles de libras. James se adentra en un oscuro y despiadado mundo de delincuencia moderna, donde organizaciones criminales utilizan tecnología avanzada para engañar a víctimas inocentes.